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TU CUERPO:

Subir las escaleras y quedarse sin aliento no quiere decir que tu condición física empeoró peligrosamente. Lo que pasa es que tu útero empieza a presionar hacia arriba tu diafragma y en consecuencia no puedes inflar tus pulmones completamente al respirar. Trata de no agitarte demasiado para no quedar jadeando.

TU BEBÉ:

¡Tu bebé está del tamaño de un espárrago!
Las partes claves de tu bebé se han terminado de formar, y ahora les toca crecer en peso y tamaño. Durante los siguientes dos meses y medio: ¡crecerá unos 10 cm más y duplicará su peso! Tu bebé necesitará muchos y variados nutrientes para este crecimiento.

TUS SÍNTOMAS:

La acidez es cada día más común ya que tu estómago está apretado y ya no te cabe todo el plato de comida adentro. Ten cuidado que no todos los antiácidos son seguros de tomar durante el embarazo. Pregúntale al farmacéutico o en el próximo control prenatal.

¡Algunos TIPS que podrían ayudarte!

Ahora es un buen momento para pensar en alternativas para manejar el dolor durante el parto. Cada parto es una experiencia única. Dos mujeres sentirán el dolor de forma distinta e incluso la misma mamá se sentirá diferente. El dolor depende de varios factores, incluyendo: el tamaño y la posición del bebé la fuerza de las contracciones el manejo del dolor por la mamá

Medicamentos como los analgésicos no son la única opción. Muchas mujeres toman clases sobre respiración y métodos de relajación. Otras toman un camino mixto entre estas técnicas y medicamentos. Otras mujeres piensan que tomar medicación hará la experiencia del nacimiento menos natural, mientras otras opinan que medicarse les permitirá participar más conscientemente en el parto. No tienes que decidir ahora, pero es bueno conocer las opciones para empezar a prepararte. Incluso si decides ahora, puedes cambiar de opinión una vez empieces el trabajo de parto.

¡No te aguantes! ¿Usualmente te aguantas para no ir a orinar al baño tan seguido? No ir cuando te urge ir puede inflamar tu vejiga, que a su vez puede irritar tu útero y causar contracciones. También puede originar infección urinaria, otra causa de contracciones prematuras. Entonces no te aguantes ni disminuyas tu ingesta de líquidos, cuando tengas que ir, ¡anda!

Preguntas y respuestas frecuentes

Preparándonos para el nacimiento. ¿Rapar los primeros cabellos de mi bebé harán que luego su pelo crezca más fuerte?

Hay bebés que nacen con una cabellera abundante que incluso se extiende hacia la cara (un continuo entre las cejas y el pelo por ejemplo) y otros que nacen más pelados. Muchas veces este cabello no tiene nada que ver con el que tendrán de forma definitiva y probablemente lo irán perdiendo las primeras semanas de vida. Antiguamente se usaba rapar a los bebés para que les creciera el pelo más fuerte y bonito, pero se ha demostrado que raparlos no tiene ningún efecto en su cabellera posterior. Finalmente la decisión será tuya, pero como recomendación, quizás es bueno pensar en qué época del año nace tu bebé porque quizás ese cabello podrá proteger la sensible piel de su cabecita.

Ando muy torpe últimamente y me da terror caerme. ¿Le puede pasar algo a mi bebé?

En las últimas semanas del embarazo, es normal sentir que las cosas se te resbalan de las manos, las paredes se movieron o los pasillos son más estrechos que antes. Por suerte, tu bebé tiene su propio sistema de absorción de golpes de alta tecnología y varias capas: líquido amniótico, las paredes uterinas, tu cavi- dad abdominal, etc. Todo esto hace que esté muy protegido y es poco probable que le ocurra algo si te caes, a menos que sufras un accidente más grave. De todas formas, si algo ocurre, siempre es bueno que contactes a tu equipo de cuidados prenatales para hacer una revisión de que todo está bien.

¿Cuál es la diferencia entre usar analgésicos y anestesia en el parto?

Ambos son los dos principales tipos de medicación usados para aliviar el dolor de parto. Generalmente, las madres que reciben cualquier de las dos alternativas deben quedarse internadas para hacerles seguimiento. Ambos tipos de medicamentos incrementan el riesgo de mareos, debilitamientos, y caídas. Un analgésico alivia el dolor sin una pérdida completa de sensibilidad o movimiento muscular. Los analgésicos alivian, pero generalmente no eliminan completamente el dolor. La anestesia bloquea el dolor. Los anestésicos pueden mantener tu capacidad de sentir presión o sensibilidad al tacto. Generalmente, los anestésicos son administrados por un anestesiólogo, que es un médico entrenado para el manejo del dolor. Habla con tu equipo de salud por tus opciones y cuándo es un buen momento para usarlas.

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